Un mendigo es una persona que habitualmente pide limosna. No es una persona que una vez pidió limosna, sino es una persona que tiene el hábito de pedir limosna. Una limosna es una cosa, especialmente dinero, que se da a otro por caridad. Los mendigos del espíritu piden habitualmente una cosa: “el espíritu”. Felices son los que piden habitualmente el espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos. (Mateo 5:3)